Esta mierda me supera (serie de TV, 2020): “Carrie”, la serie de TV

“Carrie” es un libro del gran maestro del miedo y el suspenso Stephen King, que luego se convirtió en una buena película y de no ser del remake que se hizo de It, sería la historia más conocida del autor. En resumen Carrie, el libro, es un reporte de los sucesos acaecidos en una pequeña ciudad, la noche del baile de promoción en la que una jovencita demostró tener poderes sobrenaturales, que no podía controlar del todo, y que al liberarse por un estado de stress muy intenso, asesina a muchos de sus compañeros. El libro es espeluznante en la manera en que va desgranando la historia de Carrie, su madre ultra religiosa fanática, y los eventos que poco a poco la llevaron a la terrible noche en que asesinó a tantas personas sin querer. Pedazo a pedazo, con cuidado, uno va sintiendo que las cosas no solo van a salir mal, sino que van a salir MUY mal y que no hay nada que hacer para evitarlo porque ya ocurrieron. Una película que hoy debería ser de visión obligatoria en un mundo lleno de “bulin” no por que haya por ahí muchos adolescentes con poderes telequinéticos, sino por las consecuencias impredecibles que pueden acarrear presionar mucho a un adolescente huraño y con problemas de personalidad. Un tiroteo por ejemplo. Pero no nos alejemos del tema “NO estoy bien con esto” (me gusta más el nombre que le han puesto en español) sigue esta ruta casi de manera calcada en cuanto a como su protagonista se topa con sus poderes y como estos se potencian por su stress y el sentirse muy diferente. Pero le agregan de una manera interesante algo de humor y toque ligeros de romance, hasta que te das cuenta… cuando ya digamos es demasiado tarde… que nuevamente estas ante una torre jenga muy inestable y que todo se va a ir al carajo en minutos. En ese sentido la serie es muy hábil para conectarse con el espectador (casi todos tenemos un nerd oprimido dentro y recuerdos, malos, de él) y luego simplemente abre la mano y lo deja caer, con un final de temporada que se nos antoja inesperado e imprevisible. E injusto, porque no se puede quedar así y deja la puerta abierta para que la historia avance por muchos rumbos. Lo curioso es que esta historia no se basa como pensáramos en Carrie, sino en su propia novela gráfica, obra de Charles Forsman, que me pongo a buscar de inmediato. Que me supongo es la que si se basa en Carrie.

Sydney es una adolescente opacada, poco femenina, con un gran mundo interior pero con una limitadísima capacidad de socializar. Su familia es todo lo disfuncional que puede ser: una madre joven que tiene que trabajar mucho para poder sostener a su familia, y con la que se lleva a las patadas, un hermano pequeño que tiene sus propios problemas en el colegio, donde sufre acoso. Y su papá…. bueno, simplemente se suicidó, dejando a la pobre Syd llena de preguntas y problemas. Tiene una sola amiga en el colegio, una chica llamada Dina que es todo lo contrario que ella y de la que se volvió amiga solo porque llegaron como las “nuevas” al colegio el mismo día. Pero Dina está destinada a ser de los populares del colegio y eso empieza a ocurrir y aunque Dina se esfuerza, Syd prefiere pasar de eso. Así que mientras su pequeño mundo empieza a destruirse, ella descubre que bajo estados de gran stress tiene “poderes mentales” que le permiten mover cosas, por ejemplo. Y que aunque parece cosa interesante y divertida al principio, también se da cuenta que no tienen ningún control de su poder, de su intensidad, y empieza a pensar que es peligrosa para su entorno y a esperar que un día pase algo realmente grave si su poder se descontrola.