Sumergirse en el universo de Gundam no es tarea sencilla. Son decenas las encarnaciones que este universo ha tenido y tiene, y sin duda tendrá. Básicamente estamos ante historias de guerra, muchas de ellas contadas con mucho dramatismo, y cosa curiosa, el interesado en pasear por este universo tendrá la oportunidad de pertenecer, o participar, como ambas partes del universo. Esto quiere decir que en Gundam, en el cual básicamente vemos el conflicto entre la Federación de la Tierra y el Principado Zion, a veces te toca ser malo y a veces ser bueno. Eso hace que con el tiempo notes que en la guerra no hay buenos ni malos, que ambos bandos tienen poderosas razones que defender y que el conflicto armado no es la manera mejor para defender esos derechos. Basado en la idea original de Yoshiyuki Tomino, la saga de Gundam ofreció otro cambio revolucionario además de la posibilidad de entender a ambos bandos en conflicto. Hasta antes de Gundam los protagonistas de los show de mecha eran los mechas en si. Robots como Mazinger Z eran los protagonistas del show y todos esperábamos verlo aparecer, mientras que, aunque salía mucho, Koji Kabuto, era solo su piloto. Con Tomino eso cambio: los robots seguían siendo muy importantes y con diseños trabajados con mucho cuidado y esmero, pero eran los pilotos los que aportaban forma e interés a la trama. Cuando el piloto estaba fuera de su robot, estos volvían a la categoría de máquinas no pensantes, y todo el drama que quisiera ofrecer la trama quedaba en manos de los protagonistas humanos. Incluso con episodios en que casi no salían los robots o no había peleas y acción. Para la época en que esto se hizo así la sociedad occidental no entiendo el chiste y llevó buen rato en conseguirlo. Mientras que los programas de Gundam se hacían cada vez más populares. Y así llegamos hasta el día de hoy en que Netflix presenta nueva mini serie de Gundam, hecha completamente en animación digital, pero en la que claramente se han gastado su platita ya que la calidad de la animación, en especial de los mechas, es excelente.
La trama se desarrolla durante las últimas etapas de la Guerra de un Año (un evento canónico en las series de Gundam) y sigue a Iria Solari, una piloto del Principado de Zion (que es la humanidad que vive en el espacio) y líder del equipo de mobile suit «Lobos Rojos», que tiene la tarea de defender el frente europeo contra los esfuerzos de las fuerzas de la Federación Terrestre por recuperar el área, esto es la humanidad que prefirió quedarse en Tierra. Esta desavenencia, quedarse o partir, originó una ruptura en la humanidad y rápidamente una guerra. La serie inicia con un fallido intento por tomar una base terrestre por parte de Zion, el cual salva el día solo por la aparición de los Lobos Rojos y sus mobile suit, llamados Zaku. Pero cuando las tropas ya se habían relajado pensando en el día siguiente, el campamento de Zion es atacado por un solitario mobile suit, el cual fácilmente destruye el campamento y los zaku acantonados ahí. Un mobile suit de la federación, un Gundam. Iria solo puede huir y observar aterrorizada este mobile suit terrestre y su inmenso poder de destrucción mientras trata de salvar la vida de los suyos. De ahí en adelante acompañaremos a los remanentes de Zion en su camino para reagruparse y sus intentos de encontrar la manera de derrotar a este nuevo Gundam.
[…] ¿Y esto a que viene? pues es simple, como ya habíamos comentado, se ha lanzado el live-action de Sono…