Esta serie con sus 13 episodios, es una joya etérea que combina el susurro del amor con los enigmas de un futuro distópico. Uno de esos «animes raros» que surgen de cuando en cuando y retan a los géneros y estratos a los que supuestamente deberían pertenecer. Producido por Arvo Animation, este proyecto adapta fielmente el manga homónimo escrito e ilustrado por Jun Mayuzuki, una autora cuya pluma ya enamoró a muchos con After the Rain. El manga, serializado en la revista Weekly Young Jump de Shueisha desde noviembre de 2019, permanece activo y ha tejido su magia a través de 11 volúmenes hasta abril de 2025, con el arco final en curso, prometiendo un desenlace que aún guarda sus secretos. Este no es un romance convencional; es un tapiz donde los hilos del amor se entrelazan con destellos de ciencia ficción, creando una narrativa que desafía las expectativas del género. La ciudad de Kowloon, inspirada en la histórica Kowloon Walled City de Hong Kong —un laberinto urbano densamente poblado que existió hasta 1993—, se erige como un personaje más, un refugio nostálgico donde el pasado y el futuro colisionan. Este escenario real, recreado con una atmósfera de ensueño y decadencia, envuelve la historia en una bruma de melancolía y misterio, haciendo que cada callejuela parezca susurrar recuerdos olvidados. La combinación de un romance adulto, con personajes en sus treintas, y elementos sci-fi como la enigmática Generic Terra, una tecnología que promete inmortalidad, eleva esta obra a un plano donde el corazón y la mente se debaten entre el amor y lo desconocido.
La trama de Kowloon Generic Romance sigue a Reiko Kujirai, una agente inmobiliaria de 32 años, y Hajime Kudou, su colega de 34, en la mítica Kowloon Walled City, un lugar donde el tiempo parece detenido, pero con un trasfondo futurista que inquieta. Su relación, cargada de una química palpable pero fracturada por un pasado que Reiko no recuerda, es el corazón pulsante de la historia. Un avance inesperado de Hajime, seguido de una disculpa apresurada, despierta en Reiko una búsqueda por desentrañar su amnesia, revelando fragmentos de un amor que quizás fue suyo, pero que ahora solo vive en los ojos nostálgicos de Kudou. La presencia de Generic Terra, un octaedro flotante que guarda memorias humanas, y la sombra del Hebinuma Group, con sus oscuros intereses, sugieren que Kowloon es más que una ciudad: podría ser una simulación, un eco de deseos y pérdidas. Cada episodio desvela pistas —un par de gafas que muestran recuerdos ajenos, un encuentro con personajes que saben demasiado— pero el misterio persiste, como un amor que se siente eterno pero inalcanzable. ¿Es Reiko una copia, un reflejo de alguien que Kudou amó? La serie, sin resolver estas preguntas, invita a perderse en su atmósfera, donde el romance y el enigma se abrazan en un vals sin fin.
Todo eso que comentas fueron de mis primeros encontronazos que tuve con los dilemas morales clásicos. En especial con la…