Como decía, a mi me da algo si comienzo a coleccionar algo y las posibilidades de conseguir completarlo me es lejana. Es mi TOC. Por eso voy siempre por los «one shot», es decir historias únicas en un solo tomo. Y esta es de mis favoritas, igual que We3. Así que mientras voy reconstruyendo el blog, también hago lo propio con mi biblioteca personal y le agrego tomos que siempre había querido tener. Este es uno de ellos y debo recomendárselos de todas maneras. Aunque debo decir que su final no sería apto para un niño, el cual podría interesarse en este cómic por los «leoncitos». De hecho esta no es una historia que es para adultos, pero su final va a causarles problemas… incluso a los propios adultos. Basada en un hecho real que ocurre en abril del 2003, cuando Estados Unidos invade Bagdad y los leones de su zoológico consiguen escapar y deambular por la ciudad en ruinas. Este novela gráfica de Brian K. Vaughan y Niko Henrichon, no se publicaría hasta mucho después bajo el título «Leones de Bagdad» en su versión en español, para la editorial norteamericana DC Cómics, en 2006. No tiene pierde en cualquier biblioteca. Un arte impecable, una gran colorización y por supuesto una trama que tiene un poco de todo hará que ames esta historia, más aun sabiendo que ocurrió tal como la cuentan al principio y al final… y porque no, podría ser que la parte del medio también sea un poco lo que ocurrió en realidad.
La ciudad de Bagdad sufre bombardeo aéreo y como parte de ello, las paredes del zoológico son destruidas y muchos de los animales que vivían ahí huyen. Ahora son libres, pero no tienen rumbo o a donde ir. Ni quien los alimente pues están acostumbrados a estar en cautiverio, es decir que alguien vele por ellos. Entre los liberados está una manada de leones formado por cuatro de ellos. Zill (un león macho), Safa (una vieja leona tuerta), Noor (una joven leona pareja de Zill) y el cachorro Alí (hijo de Noor y Zill). cada uno de ellos tendrá opiniones diferentes con respecto a las circunstancias que les toca a vivir y como vivirlas. Safa es reluctante de abandonar el zoo, en donde se siente segura pues conoce a fondo como es el mundo real; Noor, anhela la libertad para ella y para su hijo y está dispuesta a cualquier cosa para conseguirla; Zill se siente un poco sobrepasado por su labor de macho dominante y no sabe que hacer a continuación y Alí es solo un niño. Todo le sorprende, siente que es un gran juego, y le llama la atención pues no comprende cuan peligroso puede ser el mundo en realidad. Así los cuatro leones avanzan por la ciudad en ruinas mientras buscan con que alimentarse y se cruzan con otros animales. Cada uno de los leones adultos además tienen sus propios valores y moral, la cual pondrán en evidencia… mientras caminan lentamente a su destino final.
[…] ¿Y esto a que viene? pues es simple, como ya habíamos comentado, se ha lanzado el live-action de Sono…