
Ahora que ando ordenando mis discos duros externos y botando toneladas de basura digital que ya no me sirven de nada (como cerca de mil PPT que eran la manera en que nos pasábamos los que hoy se llaman memes, allá por la prehistoria del internet, directo a tu correo) he tenido el placer de toparme nuevamente con esta historia que en su momento me pareció genial y aun me lo parece según veo. Y – The Last Man es un cómic de ciencia ficción postapocalíptica publicado por Vertigo, sello editorial de DC Comics especializado en historias más adultas y experimentales. La serie se publicó entre septiembre de 2002 y marzo de 2008, a lo largo de 60 números recopilados en 10 volúmenes. Sus creadores son el guionista Brian K. Vaughan y la dibujante Pia Guerra. Vaughan, antes de esta obra, ya había trabajado para Marvel en títulos como Ultimate X-Men y Runaways, mostrando su gusto por los universos alternativos y la exploración de la condición humana en entornos extremos. Pia Guerra, por su parte, había colaborado en revistas independientes y en proyectos como The Simpsons Comics, lo que hacía aún más interesante su salto a una historia de tono serio y dramático. El colorista era José Marzán Jr., veterano del cómic mainstream. La premisa de “todos los hombres desaparecen” no es exclusiva de Y – The Last Man. En la literatura japonesa, por ejemplo, encontramos en el manga/anime, con una historia que parece beber directamente de Y, a Shūmatsu no Harem, también conocido como «El harén del fin del mundo» en la que un virus llamado «MK» (Male Killer) mata a la población masculina, dejando vivos solo a algunos que por razones diversas estaban en criogenia cuando se desato la pandemia. Y en el cómic occidental podemos citar Amethyst: Princess of Gemworld, que juega con sociedades matriarcales. Incluso en la literatura anglosajona, novelas como Houston, Houston, Do You Read? de James Tiptree Jr. retratan futuros donde los hombres han desaparecido, explorando las implicancias sociales y biológicas de un mundo enteramente femenino. La obra tuvo una adaptación televisiva: “Y: The Last Man” (FX on Hulu, 2021), que contó con una única temporada de 10 episodios antes de ser cancelada. Aunque intentó capturar el espíritu del cómic, cambió varios elementos narrativos y recibió críticas mixtas por ritmo y tono.
En cuanto a la historia, todo arranca con Yorick Brown, un joven aspirante a escapista, y su inseparable mono capuchino, Ampersand (esto signo de aquí es una ampersand: «&» y es una «y» que se utiliza para indicar que dos cosas están profundamente ligadas y no solo «juntas»). Un día cualquiera, sin previo aviso y por causas inicialmente desconocidas, todos los mamíferos con cromosoma Y mueren súbitamente. Pilotos de avión, presidentes, agricultores, soldados… todos caen muertos, provocando un colapso instantáneo de la civilización moderna. El fenómeno no afecta a Yorick ni a Ampersand, quienes se convierten en los últimos machos de la Tierra. La situación inicial es caótica: gobiernos colapsados, transporte detenido, industrias paralizadas y sociedades que, pese a ser numéricamente viables, deben reconstruirse sin la mitad de su población y con enormes pérdidas de conocimiento técnico. Yorick se convierte, de repente, en un recurso biológico único, pero también en un blanco para grupos con intereses muy distintos: desde científicas que quieren estudiar su genética hasta sectas extremistas que desean eliminar cualquier rastro del pasado patriarcal. A partir de ahí, la trama sigue a Yorick en un viaje global junto a la agente 355 y la doctora Allison Mann, buscando la causa del evento y una posible solución para evitar la extinción completa de los hombres. La serie mezcla road trip, thriller político y especulación científica, preguntándose no solo qué pasaría si…, sino qué nos hace humanos y cómo redefinimos la sociedad cuando sus bases se derrumban.

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