Debo confesar que desde se anunció que esta serie estaba en trabajo y que se conectaba directamente con la serie animada clásica de 1992 me embargó la nostalgia de aquellos lejanos años en que era un muchacho. Y veía esta serie antes de ver Power Rangers (¿o era después?). Aquí también debo confesar que de inmediato me preocupó los ahora bastante normales y odiosos cambios que le hacen a las cosas para cumplir cuotas y agendas. Para colmo su showrunner y guionista fue despedido del proyecto a días del estreno por estar metido en el rollo de los OF. Pocas ganas tenía entonces de verla y llevarme un chasco por el gran cariño que le tengo a la serie vieja. Creada para el streaming de Disney+ como decía es una secuela que retoma la historia a partir de los acontecimientos con los que finaliza esta serie, poniendo a la troupe mutante ante nuevos y peligrosos desafíos, luego de la pérdida de su mentor, Charles Xavier, el Profesor X (me viene siendo urgente encontrar y volver a ver la serie vieja… han pasado demasiados años, no recuerdo algunas cosas). La primera cosa que si hay que agradecer es que se han tomado el trabajo en animarla como si fuera una serie animada de los noventas… literalmente se ve vieja y maltratada pero sabemos que es animación completamente nueva. También es bueno notar que los personajes en su mayoría conservan sus características clásicas y sobretodo sus trajes colorinches, que fueron omitidos siempre en las versiones para cine live action que ha tenido esta franquicia (aunque la próxima a estrenarse película de Deadpool parece que contradecirá eso). Por lo pronto sabemos que la recientemente estrenada primera temporada constará de diez episodios y que hay al menos dos temporadas ya pactadas para ser animadas. Ahora… la cuestión es… ¿mis temores eran infundados? pues si y no. Hay cosas que no me terminan de agradar y me parece innecesarias, como haber enflaquecido a Titania (Rogue) simplemente para que no tenga un cuerpo exuberante, hasta la pegajosa relación de «amistad» de Wolverine y Morpho. Esto último ha sido motivo de comentarios ya que siendo Morpho un cambiaformas se puede decir de él que no tiene sexo definido o definitivo aunque siempre se representó a si mismo como hombre. Así que aunque lo que he visto hasta ahora me ha gustado no puedo dar un veredicto definitivo hasta haber visto más.
Charles Xavier, gravemente herido, toma la difícil decisión de dejar a los integrantes de la escuela de mutantes que fundó, para poder recuperarse en el espacio exterior, con la ayuda de Lilandra, la reina del imperio Shi’ar. Desconcertados ante un mundo que sigue sin aceptarlos, los X-Men intentarán continuar el sueño del profesor, pero no va a ser fácil…. Cíclope se muestra como un líder que aun tiene que madurar y para colmo de males Jean Grey, está embarazada de él, lo que no le hace ninguna gracia a Wolverine, que aun así está dispuesto a dar todo por proteger a Jean Grey, de la cual sigue enamorado. Al mismo tiempo tecnología «centinela» empieza a rondar por las calles en manos de peligrosos grupos terroristas como los «Amigos de la Humanidad». Pero nada de esto es lo más dificIl o extraño: Magneto está en la mansión y base de los X-Men, pues el testamento de Charles lo nombra a él como heredero universal de sus bienes y de sus sueños, así que básicamente es Magneto, el archi enemigo de los X-men, quien ahora ocupa el puesto de Xavier y aunque nadie confía en él, se dedica a ayudar a humanos y mutantes por igual para llevarse bien y tratar de cumplir los suelos de su amigo Charles. ¿Podrán este grupo de mutantes adaptarse a estos cambios y salir adelante de la mano de un líder de campo inexperto como Cíclope? quien ademas ahora tiene que pensar que tipo de vida le va a dar a su hijo…
Uhm.... es que Pedro Páramo, al margen del resultado del live action o de la obra, es literatura latinoamericana que…