Y volver a empezar… una vez más… y solo porque soy MUY terco… (o cuál es la naturaleza de las cosas)

Han pasado cosas. Siempre pasan de hecho, es lo que se espera que pase con las cosas. Así que este blog ha vuelto a morir tras años de trabajo duro por la simple necesidad de que se renueve aunque sea a la fuerza. Osea que voy a cambiar un poco todo, pero sin cambiar nada en el fondo. ¿Por qué? quién sabe…. solo he tenido la necesidad de hacerlo así. No es que el blog me genere dinero. De hecho solo genera gastos, malos ratos, amsieda y la sensación de que estoy perdiendo el tiempo…. pero nació originalmente como un ejercicio de creatividad indicado por mi siquiatra para combatir mi TOC y se volvió con el paso de los años una parte de mi personalidad. Una parte colgada en internet. Y tiene más de una década. Y aquí estoy, al filo de la medianoche…. sentado pensando si es que estoy haciendo lo correcto, pero seguro de que ya no puedo regresar al paso anterior. Y es que a veces uno se siente bien y piensa que es porque hace lo correcto, pero la realidad es que la mayoría de las veces uno hace lo correcto y no se siente bien. Y así me siento yo en este momento que inauguro oficialmente los juegos del hambr… ah, no… eso es otro rollo… ¡inauguro oficialmente la versión 3.0 del Blog Perruno!

También he de decir que este reinicio no me aleja, en lo que a mi me concierne, de Revista SUGOI. Mi casa matriz, madriguera, casa del árbol y refugio. De hecho, de entre las cosas que me pasaron alguna vez, entrar en contacto con Revista SUGOI es de las más importantes que hay. Yo respeto dos cosas en las personas: lealtad e inteligencia. Lealtad para estar del «lado correcto» siempre e inteligencia para saber cual es ese «lado correcto». Nada más me interesa en las personas, solo esas dos cosas. Y en Revista SUGOI abundan las personas, según yo, que cumplen con ese parámetro tan cerrado y propio. Y por ello aunque pasen los años, ahí sigo, renegando y empujando. Que es mi forma particular de dar las gracias a Revista SUGOI por todo el apoyo que le brindó a un universitario misio que llegaba de clases a hacer su tarea en el trabajo y ponerse a diseñar y redactar para la revista. Ya no hablemos la de tóner que me gasté imprimiendo mis tareas, ni de todas las noches que dormí en la oficina porque se me cruzaba cierre de revista y exámenes y mi casa quedaba muy lejos como para perder el tiempo yendo hasta allá.

Ojo que todavía va a pasar un rato largo para terminar de adecuar todo y ponerlo a funcionar como se debe, pero por el momento es lo que hay. Hay que diseñar cosas, subirlas, cargar plugins, aprender trucos…. la tarea es enorme… y puede que eso forme parte de la razón de que le metiera un tiro sin piedad al viejo blog: entretenimiento y retos para mis ratos de ocio, para vaciarme la cabeza de ideotas, que fue lo que el médico me resetó: que hiciera «cosas» para no pensar en «cosas». Si por cualquier razón estas leyendo esto, te lo agradezco. Ya que si no fuera por los lectores afines que tengo, que se pasan y me dejan comentarios y vistas, no creo que estaría intentando reiniciar una vez más. Domo arigatou!