Como para refrescar un poco la mente y salirnos un poco de los parámetros que nos llevan del anime japonés al cartoon gringo, tenemos esta interesante propuesta canadiense, producida en exclusiva para Netflix, que sigue en su empeño de ofrecer cosas nuevas y tantear en propuestas raras tratando de reimaginar la televisión y abrir caminos, para ver que salga pato o gallareta (no me pregunten, es una frase que usaba mi abuelo… y el pato es pato y la gallareta es una fulica leucoptera, pero para mi tiene pinta de pato). Para el caso de The Hollow, conocido al español como El Vacío, tenemos 10 episodios muy bien contados con una historia interesante y llena de referencias… en mi caso, más o menos en el episodio siete ya tenía mi apuesta de como iba a acabar todo este rollo (y no me equivoqué) pero la serie, una vez asimilada su particular animación, cumple largamente con su fin primordial que es entretener y dejemos en claro que no es exactamente para niños, dentro de su forma de ser narrada (lo cual se agradece, que algo sea animado no debería condenarlo a ser entendido como para niños en exclusividad). Así que si tienen algo de tiempo para echarse una sentada no tan larga, es muy probable que The Hollow los deje completamente satisfochos.
Tres adolescentes despiertan en un cuarto cerrado, sin saber quienes son, que hacen ahí y quien los llevó. Lo único que hay en el cuarto vacío es una máquina de escribir. Y muy pronto descubrirán no solo cuales son sus nombres sino curiosas habilidades especiales las cuales deberán usar lo mejor posible para todo lo que les viene por delante. Que incluirá cosas como secretos, acertijos, monstruos, extraños seres y retos a cumplir en su intento de volver a sus casas… asumiendo que primero recuerden donde están esas casas.
[…] a los mortales comunes y corrientes (como se hace en el libro con lo mínimo). Y es que resulta,…