Número 9 es otra de esas películas que me daban mucha curiosidad, entre otras cosas porque venía refrendada por Tim Burton como productor y estar basada en un corto de Acker que fue nominado al Oscar, y la cual no pude ver porque la pusieron muy poco tiempo en las salas por aquí y ya luego le perdí la pista por completo. Estrenada el 9/9/2009 tenemos una película plagada de simbolismos y metáforas de todo calibre, entiendo que puestas ahí muy intencionalmente, para describir un mundo postapocalíptico en el que la vida ha sido destruida y lo poco que queda de “existencia” recae en un grupo de extraños seres mitad robot mitad juguete, que han sido provistos de cierto tipo de alma. En “9”, mucho de lo que se dice tiene un segundo significado más profundo y que no siempre será fácil de entender, al mismo tiempo que se nos cuenta una historia que ya de por si es bastante especial como concepto. Por lo pronto son 9 protagonistas los que vamos a conocer como nueve son las tipologías del eneagrama, un sistema de clasificación de la personalidad con ribetes místicos, y de la forma en que se relacionan estos nueve en el pasado o en el presente devendrá el cambio total en sus “vidas”, más allá del saber que sus “creadores” han sido destruidos completamente y jamás volverán. De esta manera cada personaje tiene un aspecto primordial y este lo relaciona con la historia al mismo tiempo que limita sus acciones. Ahora bien, por el lado de película tenemos una narrativa ágil en la que las cosas van ocurriendo rápidamente y muy pocas ganas de andar explicando todo al detalle. De hecho el único sinsabor que me deja verla, aparte de ser un poco atropellada, es que me hubiera gustado un poco más de profundidad en la historia y claro que más detalles. No se dejen engañar por su diseño y su visual: no es una película para niños aunque cualquier niño la podría ver.
Cuando 9 despierta a la vida, no entiende que está pasando a su alrededor. Todo es confuso y caótico. Poco a poco va recordando detalles de conocimiento en su interior pero no le sirven de gran ayuda en un mundo apocalíptico en donde todo parece destruido. Para poder sobrevivir 9 tendrá que aprender pronto las reglas de este mundo y fundamentalmente acerca de los peligros que lo pueblan. Y que él no es el único de su tipo ahí. Y que dentro de muy poco podría no quedar ni siquiera ellos con vida. Una pequeña segunda gran batalla por el mundo, la cual no tendrá testigos.
Uhm.... es que Pedro Páramo, al margen del resultado del live action o de la obra, es literatura latinoamericana que…