Y ya que estuvimos hablando de las chicas mágicas pervertidas, sigamos con otro anime de esta temporada que también hace un uso intensivo de lo ecchi para su trama, solo que esta vez hay más trama que ecchi. Y para colmo es un isekai… o por lo menos algo que se le parece porque no cumple la regla básica del isekai promedio: el protagonista muere para ir al otro mundo. Pero no nos alejemos del raje. Esta vez tenemos a «Demon Slave» o «Chained Soldier», que es como se le conoce a «Esclavo de las Tropas de Élite de la Capital Mágica», adaptación del manga escrito por Takahiro e ilustrado por Youhei Takemura, que se viene serializando desde 2019 y este año le tocó su turno de volverse anime. Para ser sincero, no es la gran cosa. Tiene todos los tópicos de rigor propias de su género…. zafarrancho de géneros… y a ese nivel cumple sin más vueltas. Chicas poderosas, mucha piel expuesta y alguna premisa básica media retorcida, pero bueno. Y como habíamos dicho a esta serie se le quita todo lo ecchi y sigue funcionando porque su historia trata de otra cosa, no de momentos lujuriosos. ¿Pero esto es bueno o es malo? pues está porque cada quien decida. Entre la trama bélico-mágica o los contados momentos en que la cosa se pone caliente. Más algo de amor no correspondido, tsundere y demás ingredientes que surgen por ahí. Y los momento ecchi…. pues como decirlo… no son todo lo ecchi que uno podría esperarse pero están al servicio de la trama y no al revés, felizmente.
Ambientada en lo que parece un Japón actual, años atrás, varios portales aparecieron por todo el país, conectando el mundo real con un mundo paralelo, conocido como Mato, poblado por demonios llamados Shuuki. Durante este primer contacto los shuuki atacaron y muchos fueron las víctimas. Pero en Mato no hay solo shuukis, también están las «peach», unas frutas mágicas que otorgan un poder a quien las coma, pero solo a las mujeres. Como resultado de este desbalance se ha instaurado en Japón una sociedad matriarcal en la cual los hombres no pasan de ser meros adornos y son considerados inútiles. Tan es así que para proteger a este Japón de los ataques provenientes de Mato se han creado una fuerza especial de combate compuesta exclusivamente por mujeres con habilidades por haber comido una peach. Estas fuerzas especiales patrullan constantemente el Mato, repelen los ataques de los shuuki y evitan que pasen al otro lado, no siempre con éxito. Cierto día, Yuuki Wakura, un estudiante del último curso de bachillerato, acaba por accidente en Mato, rodeado por shuuki y a punto de ser asesinado. Allí conocerá a Kyouka Uzen, capitana del séptimo escuadrón de la brigada antidemonios, cuyo poder es esclavizar a un ser vivo para hacerle sacar todo su poder latente y usarlo como arma, y que para las circunstancias será Yuuki en esta oportunidad, lance que Kyouka no había intentado antes. A quien acepte ser esclavizado, Kyouka lo puede convertir en un poderoso shuuki y luchar junto a ella. El problema es que Yuuki no sabia algunas cosas acerca de este compromiso cuando lo aceptó (vamos, lo iban a matar, no es como que se lo pudiera pensar mucho). La primera: que es para siempre. La segunda: que no se puede disolver. Y la tercera: que le toca una «recompensa» por cada vez que Kyouka lo utilice. Kyouka tiene un alto rango dentro de la organización, pero nadie espera que pueda subir más allá del punto que está por la naturaleza de su poder: ella tiene que cumplirle con dar alguna «picante» recompensa a su esclavo, sacada de su subconsciente. Y entre más poder use el esclavo, más calentorra será la recompensa. Y Yuuki no es que tenga la mente más limpia de ambos mundos. Con eso ya comprendido Yuuki, que pensó que se iba a convertir en alguna especie de super soldado héroe luego de demostrar que su transformación es realmente poderosa, descubre que su papel en Mato es más bien el de ser el ama de llaves del séptimo escuadrón, y encargarse de las tares de la casa, en este caso dormitorio para chicas, hasta que sea llamado a entrar en combate. Así que ya saben Yuuki va a terminar viendo de todo y en color…. porque así son estas cosas. Y también derrotará algunos monstruosos peligrosos, claro.
[…] Y eso de alguna manera refresca el género, como ya vimos en la totalmente inadecuada y divertida Scouts Guide…