Que duda cabe que el molesto fantasma que en su momento interpretara Michael Keaton, se convirtió en un ícono de finales de los ochentas y todo un referente cultural. Con él estaba una joven Winona Ryder, quien vio despegar su carrera con esta película convirtiéndose ella por si misma en otro icono cultural con excelentes películas posteriores como «Edward Scissorhands» (1990), «La casa de los espíritus» (1993) y «Reality Bites» (1994), entre muchas otras. Seguro muchos solo la recordarán como la ligeramente desquiciada madre en «Stranger Things». Y ahora, tantísimos años después nos toca volver a verlos juntos haciendo una secuela de la película clásica. Y acompañados nada menos y nada más que de Merlina, si, la mismísima Jenna Ortega, que la verdad calza perfecto con el espíritu de esta historia, como la hija de Lydia Deetz, el personaje de Winona en la cinta original. Una maravilla… que no habíamos pedido. Viendo el trailer todo parece estar bien y listo para funcionar. Que funcione es otra cosa. Pero por lo menos no nos han puesto un Beetlejuice racializado y por cuota. Ahí se los dejo.
Toda esta vaina es como un péndulo, y por estos días ya vamos de bajada desde lo más duro de…